Alessandra DeBlasio es una profesional exitosa tanto como abogada litigante como en casos de apelación. Ha encabezado más de 30 juicios ante tribunales federales hasta la etapa del veredicto, litigado más de 20 apelaciones ante tribunales tanto federales como estatales y resuelto más de 100 casos federales penales sin necesidad de llevarlos a juicio.
Antes de establecer su propio bufete individual en el 2009, la Dra. DeBlasio representó al gobierno de los Estados Unidos durante casi ocho años ante los tribunales federales de primera instancia y de apelación, así como en el terreno internacional:
Comencé mi carrera gubernamental en la sede central del Departamento de Justicia de los Estados Unidos, en Washington, D.C., como miembro de la Oficina de Asuntos Internacionales de la División Penal:
A continuación me mudé desde Washington, D.C., a Alexandria, cruzando el río Potomac, para incorporarme a la Fiscalía Federal del Distrito Este de Virginia. En esa oficina fui la segunda al mando dentro de la Unidad de Apelaciones Penales:
Posteriormente me transferí a la Fiscalía Federal de Washington, D.C., donde tuve un papel en el encausamiento penal de más de cien casos penales violentos y no violentos, incluyendo 30 casos de delito mayor y delito menor que llevé personalmente a juicio.
Tras esos ocho años de trabajo profesional en el sector público, pero antes de establecer su propio bufete individual, la Dra. DeBlasio trabajó como litigante para otros bufetes legales de la ciudad de Nueva York.
Trabajé como litigante experimentada para el reconocido bufete de derecho internacional Shearman & Sterling LLP, donde trabajé junto con abogados socios y adjuntos para darle consejo legal a compañías multinacionales que estaban siendo investigadas por la SEC y por el Departamento de Justicia por el posible abuso de información privilegiada y por posibles infracciones a la ley en contra de prácticas corruptas en el extranjero. Asimismo, me hice cargo de varios casos pro bono y serví como mentora para nuevos abogados litigantes que se preparaban para sus primeras comparecencias ante un juez en casos penales e inmigratorios pro bono.
También trabajé para el legendario bufete legal de Nueva York especializado en daños personales que encabezaba mi padre, Peter E. DeBlasio –un orador de renombre y maestro de la sala judicial- que ya está jubilado pero que en su apogeo era reconocido por sus colegas a lo largo y ancho del país como uno de los mejores abogados litigantes de la segunda mitad del siglo veinte. A lo largo de los años trabajé por momentos en el bufete legal de mi padre, colaborando en incontables asuntos previos a juicio y en el año 2005-2006, durante el último año de ejercicio profesional de mi padre, llevando a juicio y ganando el último caso que manejó el bufete, un caso de muerte por negligencia ante el tribunal federal de Manhattan.
La Dra. DeBlasio también se ha desempeñado como profesora adjunta en la Facultad de Derecho de Fordham University, así como profesora invitada, en más de una ocasión, en la Facultad de Derecho de George Washington University. Por añadidura, en la década de los noventa trabajó como consultora para diversas organizaciones de derechos civiles y de derechos humanos internacionales, en asuntos que involucraban a los Estados Unidos, Brasil y Mozambique.
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